La perseverancia es la capacidad para seguir adelante a pesar de los obstáculos, dificultades, desánimo, aburrimiento, frustración, o los propios deseos de rendirse. La persona perseverante termina lo que ha empezado, vuelve a intentarlo tras un fracaso inicial, persigue sus objetivos y se mantiene concentrada y trabajando en su tarea. Por el contrario, si nos vamos al extremo opuesto de la perseverancia, nos encontramos con personas perezosas y vagas, que se rinden demasiado pronto o que ni siquiera lo intentan, que buscan lo fácil y toman atajos siempre que pueden, pierden el interés con facilidad y abandonan ante la más mínima dificultad. Con este entrenamiento vivencial logre que los supervisores de su empresa desarrollen la competencia de perseverancia.