El clima laboral no es otra cosa el medio en el que se desarrolla el trabajo cotidiano. La calidad de este clima influye directamente en la satisfacción de los trabajadores y por lo tanto en la productividad empresarial. Si eres capaz de conseguir una mayor productividad con un buen clima laboral, tienes todo lo necesario para conseguir grande éxitos en tu empresa. De aquella manera, mientras que un buen clima se orienta hacia los objetivos generales, un mal clima destruye el ambiente de trabajo ocasionando situaciones de conflicto, malestar y generando un bajo rendimiento. Un buen clima laboral es el catalizador para el logro de objetivos organizacionales, es necesario conocerlo y poner en marcha las estrategias necesarias para mejorarlo continuamente. Si en su organización viven problemas de un mal ambiente este es el curso que le proporcionará las herramientas prácticas para mejorarlo.